Así que he pensado que sería bueno hablar sobre The circle of life de otra manera: hablar de mis plantas.
Yo tengo unas cuantas plantitas repartidas por la casa: unos geranios, unos cactus, un par de aloe vera, unas cuantas más de exterior y alguna de interior. En total algo más de 30 plantas llego a contar.
A ver, aquí hacer una puntualización: yo soy un poco descuidado con las plantas. No estoy todo el día encima de ellas (como mi hermana que casi las mima como si fueran un cachorrillo), ni las estoy podando, abonando, trasplantando a cada tiempo (alguna vez lo hago, aunque problablemente no cuando debería). Pero tampoco están abandonadas: se riegan (que de eso se encarga mi chico, porque a mi se me olvidaba algunos días y él se encarga de que por agua no sea... aunque se ahoguen si me descuido), se las expone a la luz (indirecta si lo necesitan así), tienen tierra, abrigo, y si no les gusta el sitio, las cambio si veo que se mustian un poco o se queman por el sol.
Pero aun así, muchas plantas terminan muriendo. Alguna porque el clima de esta zona no les viene bien. Alguna porque se me olvidó regarla (mea culpa y lo asumo). Alguna por exceso de riego (ya he hablado de lo que le gusta a mi chico regar macetas). Alguna por la plaga de pulgón (¡mis pobres rosales!).Y alguna de puro aburrimiento, porque motivo no tenían.
Y aunque a veces siento como que soy un mal "padre" para mis plantas, luego veo a mis hermanas y me dicen que también a veces se les muere alguna (incluso alguna ha aguantado más en mi casa), y mira, me quedo como más tranquilo, porque en el fondo, en eso debe consistir el tener plantas. En cuidarlas hasta que por lo que sea mueran, y entonces compras una nueva y la pones en sustitución. Y así mi conciencia se relaja un poco y disfruta del tiempo en que están bonitas y adornan la casa. Y para mi, ese es el círculo de la vida de la planta de hogar.
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